El Desarrollo Rural Territorial es concebido como un proceso de transformación tanto a nivel productivo como institucional, en un lugar determinado donde la intención es lograr reducir el nivel de pobreza de su población y por ende lograr una mejor calidad de vida.
Entonces al hacer una transformación productiva se necesita del cambio en la forma de concepción de la producción en determinado territorio buscando que la cadena de producción sea más eficiente y logre los mejores resultados posibles, aquí va a estar muy implicado tanto el desarrollo y la mejora en la calidad de vida de los trabajadores, como el uso eficiente de los recursos y por tanto la búsqueda del cuidado del medio ambiente, logrando de esta manera productos de excelente calidad para un mercado más competitivo.
Por otra parte, el desarrollo institucional implica un cambio de mentalidad tanto de las personas que forman parte del territorio, como de todos los agentes públicos y privados que se vean implicados en este proceso; si en Colombia el ambito institucional fuera abordado de la manera correcta las instituciones podrían prestar un mejor servicio a las comunidades logrando un beneficio recíproco y creo que a eso es a lo que se le quiere apostar hoy día.
Si el desarrollo Rural tuviera un enfoque territorial sería más fácil evitar la fuga de cerebros y de mano de obra en el campo y en el país, porque se estaría logrando incentivar a las personas a desarrollarse de manera integral logrando sus sueños y metas y a la vez estimulándolo a continuar en su territorio, evitando la migración a las grandes urbes.
RIMISP CENTRO LATINOAMERICANO PARA EL DESARROLLO RURAL (2004). Desarrollo Territorial Rural. Consultado en http://www.fao.org/
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TENDENCIAS DEL DESARROLLO AGROPECUARIO
Para podernos enfocar en el desarrollo rural como tema central, es necesario partir de diferentes escenarios que marcan el desarrollo agropecuario como enfoque de la humanidad en esta época de grandes cambios.
Es por ello que se hace necesario abordar importantes temas como el cambio climático, la seguridad alimentaria, el desarrollo de los biocombustibles, los avances en la tecnología y los procesos de innovación, las tendencias en el consumo y las barreras que ejercen los países a la hora de producir y comercializar productos agropecuarios, entre otros temas que irán siendo objeto de discusión.
En este caso es necesario reconocer el crecimiento acelerado que ha ido teniendo la población mundial, el cual exige una mayor y más eficaz respuesta de parte del sector primario para garantizar el abastecimiento continuo de alimentos de excelente calidad, logrando ser competitivos frente al resto del comercio mundial. Además de garantizar el mantenimiento de las fuentes hídricas que son base de la vida en el planeta.
Para el sector agropecuario de las diferentes naciones se plantean grandes retos en la sociedad actual, en la cual se ha ido haciendo visible el problema de afectación de la capa de ozono y por tanto el aumento de la temperatura en el planeta, teniendo como consecuencia el deshielo de los glaciares y por ende el aumento en el nivel del mar, a su vez la afectación de diferentes especies tanto animales como vegetales. En los últimos años el mundo ha volcado su mirada sobre los países en vía de desarrollo, los cuales aún no hemos comprometido totalmente nuestros recursos naturales y por tanto somos los que poseemos las principales reservas de los mismos.
Por otra parte Colombia ha entrado a competir en el mercado de los biocombustibles, convirtiéndose esto en una oportunidad de acceso a mercados externos, pero a la vez en una amenaza para garantizar el autoabastecimiento y evitar una especulación en los precios al consumidor de estos productos agropecuarios.
Se hace visible la necesidad de fortalecer el sector agropecuario a través del uso de tecnologías que sean amigables con el medio ambiente, pero que a la vez sean sostenibles en el largo plazo, dando como resultado la garantía de que el planeta que hemos tomado prestado a las futuras generaciones se lo podemos entregar en mejores condiciones de lo que nosotros lo hemos recibido. Así es importante seguir avanzando en investigación y en aplicación de herramientas que favorezcan el desarrollo no solamente de quienes las crean sino que a su vez esté disponibles de manera racional para todas las naciones.
Aún más, considero que es importante seguir avanzando en la educación de las nuevas generaciones, especialmente de aquellas que se encuentran en las zonas rurales de los países, con especiales incentivos para que se preparen pero a la vez continúen trabajando allí.
Por último necesitamos ser concientes de que el desarrollo agropecuario no solo es tema de quienes nos dedicamos a ello sino de todos.
Es por ello que se hace necesario abordar importantes temas como el cambio climático, la seguridad alimentaria, el desarrollo de los biocombustibles, los avances en la tecnología y los procesos de innovación, las tendencias en el consumo y las barreras que ejercen los países a la hora de producir y comercializar productos agropecuarios, entre otros temas que irán siendo objeto de discusión.
En este caso es necesario reconocer el crecimiento acelerado que ha ido teniendo la población mundial, el cual exige una mayor y más eficaz respuesta de parte del sector primario para garantizar el abastecimiento continuo de alimentos de excelente calidad, logrando ser competitivos frente al resto del comercio mundial. Además de garantizar el mantenimiento de las fuentes hídricas que son base de la vida en el planeta.
Para el sector agropecuario de las diferentes naciones se plantean grandes retos en la sociedad actual, en la cual se ha ido haciendo visible el problema de afectación de la capa de ozono y por tanto el aumento de la temperatura en el planeta, teniendo como consecuencia el deshielo de los glaciares y por ende el aumento en el nivel del mar, a su vez la afectación de diferentes especies tanto animales como vegetales. En los últimos años el mundo ha volcado su mirada sobre los países en vía de desarrollo, los cuales aún no hemos comprometido totalmente nuestros recursos naturales y por tanto somos los que poseemos las principales reservas de los mismos.
Por otra parte Colombia ha entrado a competir en el mercado de los biocombustibles, convirtiéndose esto en una oportunidad de acceso a mercados externos, pero a la vez en una amenaza para garantizar el autoabastecimiento y evitar una especulación en los precios al consumidor de estos productos agropecuarios.
Se hace visible la necesidad de fortalecer el sector agropecuario a través del uso de tecnologías que sean amigables con el medio ambiente, pero que a la vez sean sostenibles en el largo plazo, dando como resultado la garantía de que el planeta que hemos tomado prestado a las futuras generaciones se lo podemos entregar en mejores condiciones de lo que nosotros lo hemos recibido. Así es importante seguir avanzando en investigación y en aplicación de herramientas que favorezcan el desarrollo no solamente de quienes las crean sino que a su vez esté disponibles de manera racional para todas las naciones.
Aún más, considero que es importante seguir avanzando en la educación de las nuevas generaciones, especialmente de aquellas que se encuentran en las zonas rurales de los países, con especiales incentivos para que se preparen pero a la vez continúen trabajando allí.
Por último necesitamos ser concientes de que el desarrollo agropecuario no solo es tema de quienes nos dedicamos a ello sino de todos.
